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La ingesta inadecuada o excesiva de flúor

La ingesta de flúor tiene tanto efectos beneficiosos-al reducir la incidencia de caries dental – como efectos negativos – al causar fluorosis del esmalte dental y esquelético después de una exposición prolongada y alta. Los rangos de ingesta que producen estos efectos opuestos no están muy separados.

Se estima que la caries de los dientes permanentes es la más prevalente de todas las afecciones evaluadas, con 2,4 mil millones de personas en todo el mundo que sufren de caries de dientes permanentes y 486 millones de niños de caries de dientes primarios. Se necesitan medidas de salud pública para proporcionar una ingesta suficiente de fluoruro en las áreas donde falta, a fin de minimizar la caries dental. Esto se puede hacer a través de la fluoración del agua potable o, cuando esto no es posible, a través de la fluoración de la sal o la leche o el uso de productos para el cuidado dental que contienen fluoruro, y abogando por una dieta baja en azúcar.

La ingesta excesiva de fluoruro generalmente ocurre a través del consumo de agua subterránea naturalmente rica en fluoruro, particularmente en climas cálidos donde el consumo de agua es mayor, o donde se usa agua con alto contenido de fluoruro en la preparación de alimentos o el riego de cultivos. Dicha exposición puede provocar fluorosis dental o fluorosis esquelética paralizante, que se asocia con osteoesclerosis, calcificación de tendones y ligamentos y deformidades óseas. Si bien la prevalencia mundial de fluorosis dental y esquelética no está del todo clara, se estima que las concentraciones excesivas de fluoruro en el agua potable han causado decenas de millones de casos de fluorosis dental y esquelética en todo el mundo a lo largo de varios años. Aunque eliminar el exceso de fluoruro del agua potable puede ser difícil y costoso, existen soluciones de bajo costo que se pueden aplicar a nivel local.

La OMS ha publicado directrices para ayudar a las comunidades a controlar la exposición al fluoruro a fin de establecer un equilibrio importante entre la prevención de la caries y la protección contra los efectos adversos. Sin embargo, las medidas de mitigación de riesgos que se apliquen también deben tener en cuenta los contextos y sensibilidades locales.